80 años del exilio: un viaje familiar
- Isabel Gonzalez
- Jul 11, 2020
- 2 min read
Updated: Oct 13, 2020
El pasado 13 de junio de 2019, mi familia y yo viajamos a vivir los actos conmemorativos del 80 aniversario del exilio de refugiados republicanos españoles en Veracruz, Veracruz. Ochenta años atrás, varios barcos llegaron al puerto de Veracruz en México, escapando la Guerra Civil española. En uno de estos barcos venía mi bisabuelo y más tarde, también llegó mi abuela a asentarse en Veracruz y a empezar una nueva vida en México. Estos barcos trajeron desde niños, hasta personas mayores y en ese fin de semana pudimos festejar la llegada de esta gente y agradecer el refugio que dio México en estos tiempos de desesperación. Aunque se conmemoraba algo intenso y devastador, pude notar que todos los eventos y sobrevivientes presentes mostraban sentimientos de alegría, fraternidad y agradecimiento hacia el país mexicano.
En el primer evento, diferentes figuras públicas, ambas del gobierno mexicano y español, hablaron sobre el exilio español y expresaron lo que este suceso significaba para ellos. Creo que lo más importante que noté en esta inauguración, fue el gran agradecimiento que mostraban las autoridades españolas hacia México y hacia el presidente Lázaro Cárdenas, que fue el que le abrió las puertas a los refugiados españoles. El tema también tomó gran relevancia por los recientes acontecimientos sobre los refugiados en México, especialmente cuando el concepto ser "ciudadano del mundo" fue mencionado. Este concepto, el que se refiere a que somos todos parte de un mismo lugar, sin deber de tener la necesidad de escapar o de no encontrar otro hogar, fueron unas de las palabras que más me impactaron del evento.
Al final del evento se cantó el himno nacional mexicano, y si veías a tu al rededor, había varias personas con lágrimas en sus ojos. Este evento conmemoró la unión de estas naciones, la mexicana y la española, y la ayuda que fue brindada de uno al otro en tiempos devastadores.

A lo largo del viaje fuimos a foros, a inauguraciones y hasta a ver un documental increíble titulado: Un exilio: película familiar.
Sin embargo, creo que mi parte favorita del viaje fue caminar por las calles de Veracruz, escuchando a mi abuelita hablar sobre los lugares que veíamos como si nunca se hubiera ido de ahí. En ese momento me di cuenta de lo importante que fue Veracruz para estos cientos de personas. No solo fue una ciudad que les abrió sus puertas para ofrecer refugio, si no que les dio la oportunidad de comenzar una nueva vida y de tener un nuevo hogar. Uno con el que compartirían cultura, ideas y familias.
Aunque siempre he considerado que mi identidad tiene dos nacionalidades debido a mi ascendencia española, nunca había comprendido tanto la unión de estas dos partes de mí hasta este viaje. Al ver a mi abuela y a toda esa gente que había sido exiliada de su país natal, mostrar tanto afecto y amor hacia México, pude darme cuenta que mi identidad no está dividida en dos. Al revés, la historia del exilio español y la bienvenida que le dio México a esta gente, logró crear nuevas generaciones con una nueva identidad. Una con cariño y respeto hacia la cultura española, pero también de agradecimiento y amor a nuestro hogar en común: México.

Me gustó mucho lo que escribiste , valorando lo difícil que es dejar todo para ser migrante en otro país , ( algo intenso y devastador ) , pero al fin y al cabo , fusionarse con otra cultura y conmemorar con alegría esa nueva oportunidad de vida .
Y me gustó sobre todo tu conclusión donde mencionas que tu identidad no está partida en dos , sino en una nueva , que quieres a los dos países , y yo me atrevo a decir , es una identidad donde eres , Ciudadana del Mundo .
Qué hermosas palabras, qué orgullo saber que lo percibes así. Y que la unión de las dos culturas pueda dejar en las siguientes generaciones tanto agradecimiento y fraternidad entre los dos países.